Estimula y acelera el ciclo vegetativo de las plantas. El suelo conserva mejor la humedad, disminuyendo la necesidad de riego y amortiguando los cambios de temperatura (provocados por la acción directa del sol sobre las macetas). Aumenta la permeabilidad del suelo y su estructura, mejorando la exploración de las raices y su anclaje. Funciona como una fuente constante de fertilización y nutrición mediante la liberación gradual y prolongada de macronutrientes
Las plantas cultivadas son sanas y vigorosas y no se enferman fácilmente, porque están naturalmente protegidas por la armonía nutricional que permite el buen funcionamiento de todos los procesos fisiológicos. Dicha armonía es la expresión de un suelo sano y rico en microoganismos, minerales y materia orgánica.
Presentación: 800 ml.